En el mundo de los vinos, el blanco está de moda. Su creciente popularidad se debe a la gran calidad, versatilidad y capacidad de maridaje de los vinos blancos. Y si hablamos de uvas blancas, tenemos que empezar haciéndolo de la Chardonnay.
Y es que el consumo de vino blanco está creciendo en todo el mundo más que el de tintos y rosados. Los datos internacionales son claros, e indican que el vino blanco es el tipo de vino más solicitado. Los motivos son muchos, pero podemos resumirlo en que existe un gran número de consumidores que buscan vinos más ligeros, afrutados y frescos, que además tienen un menor grado alcohólico, y que habitualmente suelen ser más económicos que los tintos. Además, el hecho de que cada vez sea más habitual encontrar vinos blancos más complejos y hasta con crianza les está haciendo perder en parte su estacionalidad y que dejen de ser considerados sólo vinos para el verano.
Originaria de la región francesa de Borgoña, donde incluso existe un pueblo con su mismo nombre, Chardonnay, estamos ante la uva blanca más importante, con la que se elaboran cientos de vinos blancos en todo el mundo. La región de California en Estados Unidos, es una de las principales zonas de Chardonnay, y de ahí nos llegan propuestas como el Three Finger Jack o el Coppola, del famoso director de cine y reconocido amante del vino. Desde la otra punta del mundo, en el sur de Australia, nos llegan también unos grandes Chardonnay, como el Penfolds. Y, claro, no podíamos dejar aparte la región donde se comenzó a elaborar vinos con esta uva: Borgoña. Desde allí, Patriarche, unas bodegas con casi dos siglos y medio de vida, nos traen Chablis, uno de los vinos blancos más famosos del mundo.
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España es una tierra de excelentes vinos blancos. Enseguida nos vienen a la cabeza los ribeiro y albariño gallegos, los finos andaluces, los blancos de Rueda y de Navarra, los espumosos catalanes… pero también encontramos grandes Chardonnay, como el Pago Mota en Castilla La Mancha o el Miranda D’Espiells del Penedés.
Si quieres probar otras opciones muy interesantes con otras uvas blancas, te recomendamos el Blaneo de Navarra, elaborado con Garnacha, o el Pirineos de la D.O. Somontano, elaborado con la impronunciable pero fresca y exuberante uva Gewürztraminer.
Blanc de blancs es el nombre que reciben los Champagne elaborados con cepa de uva Chardonnay blanca, en contraposición con los obtenidos con uvas Pinot Noir o Pinot Meunier. Los Champagne elaborados con esta uva resultan frescos y cítricos, con aromas a flores blancas como la acacia o la flor de saúco. Dos grandes ejemplos de estos vinos franceses son Bernard Remy y G.H. Martel.
Y en España también tenemos excelentes espumosos Blanc de Blancs, como el cava brut reserva Milesimé de Juvé & Camps o el Ars Collecta de Codorníu, que al predominio de la Chardonnay, le une la frescura y la acidez que aportan la Xarel.lo y la Parellada procedentes del clima mediterráneo de la zona central del Penedés.
Con o sin burbujas, los vinos blancos basados en la uva Chardonnay son una opción perfecta para comidas, cenas… y el mejor brindis.
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