Asamos las berenjenas a 190 ºC durante 50 minutos envueltas en papel de aluminio.
Enfriamos, pelamos y escurrimos en un colador durante 30 minutos.
En una sartén con un poco de aceite, pochamos la cebolla picada junto con el comino. Añadimos el azafrán y el feta desmenuzado. Cuando la cebolla tome color, incorporamos la pulpa de la berenjena asada y la nata. Mezclamos bien y retiramos del fuego.
Por último, añadimos el tomillo y removemos. Reservamos.
Cocemos la pasta siguiendo las instrucciones del paquete.
Mientras tanto, precalentamos el horno a 180 ºC
Escurrimos la pasta y la mezclamos bien con la salsa de berenjena. Lo ponemos todo en una bandeja de horno, añadimos el parmesano rallado por encima y gratinamos en el horno durante 15 minutos.
Espolvoreamos con un poco de salvia picada por encima y servimos.
En Italia es habitual el gratinado de una gran diversidad de recetas de pasta. Exceptuando los canelones y la lasaña (ambos proceden de placas), para los gratinados se usa pasta corta. La razón es porque tiene más recovecos y, de este modo, la salsa que la acompaña penetra en distintos rincones.
Para que la receta quede perfecta, hay que cocer la pasta al dente. Por un lado, una mordida tersa es mucho más agradable en el paladar. Aunque comerla al dente también otra razón de peso. La pasta firme contiene azúcares de absorción lenta que proporcionan energía de forma gradual. Por el contrario, si nos pasamos con la cocción, el almidón se transforma en azúcares rápidos.
En este caso, después de la cocción la gratinamos en el horno, aunque el gratinado no afectará a la estructura firme de la pasta.
En la receta sugerimos usar radiatori, una pasta corta que se asemeja a pequeños radiadores. En cualquier caso, se puede elaborar con macarrones, tirabuzones o similar.
Puedes encontrar todos los ingredientes para esta y otras recetas en el Supermercado de El Corte Inglés. Todos los productos que necesitas para tu cesta de la compra, incluyendo una gran variedad de frescos.
Habla ahora…