Pochamos las espinacas en una sartén con un poquito de aceite. Preparamos la salsa de caramelo salada: en una cazuela, ponemos el azúcar a media temperatura hasta que se caramelice, retiramos del fuego y añadimos la nata poco a poco. Mezclamos bien y después incorporamos la mantequilla otra vez en el fuego, y mezclamos hasta que quede una textura fina.
Sobre una tabla, solapamos lonchas de jamón cocido, untamos con la salsa de caramelo, añadimos unas lascas de jamón curado, el queso rallado y en un extremo unas pocas espinacas. Enrollamos y cortamos en porciones de unos 3-4 centímetros.
Jamón y queso. Posiblemente una de las mejores “parejas” en el mundo de la gastronomía. Y en este caso, dos jamones mejor que uno. Porque unimos en un solo rollito nuestro jamón serrano tradicional con el jamón cocido, o de York. Para el queso, hemos elegido un ahumado que aporta un sabor realmente intenso. Unas espinacas para aportar ese toque de verde que nunca debe faltar, y un caramelo salado para dar muchos más matices a este entrante realmente sorprendente.
Para emplatar, añadimos el caramelo salado y romero picado, y listo para disfrutar.
Pochamos las espinacas en una sartén con un poquito de aceite. Preparamos la salsa de caramelo salada: en una cazuela, ponemos el azúcar a media temperatura hasta que se caramelice, retiramos del fuego y añadimos la nata poco a poco. Mezclamos bien y después incorporamos la mantequilla otra vez en el fuego, y mezclamos hasta que quede una textura fina.
Sobre una tabla, solapamos lonchas de jamón cocido, untamos con la salsa de caramelo, añadimos unas lascas de jamón curado, el queso rallado y en un extremo unas pocas espinacas. Enrollamos y cortamos en porciones de unos 3-4 centímetros.
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