Lavamos y cortamos los tomates en rodajas finas, cortamos la cebolla en juliana y deshojamos el tomillo. En un molde redondo de tarta colocamos el tomate, la cebolla y 4 cucharaditas de mantequilla. Horneamos a 190° durante 20 minutos, sacamos y dejamos reposar 5 minutos.
Extendemos la masa quebrada por encima remetiendo bien el borde. Horneamos otros 20 minutos y la sacamos del horno.
Esta tarta salada es realmente sencilla de preparar y será un entrante perfecto en cualquier comida o cena. Es una mezcla perfecta entre una ensalada de tomate, cebolla y queso de cabra, y una tarta Tatin por la incorporación de la masa quebrada.
Con la ayuda de un plato damos la vuelta a la tarta y terminamos por encima con trocitos de queso de cabra y hojas de tomillo espolvoreado.
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